La Entrevista
Autor: Laura Roldán
El
encuentro con Jesús Lemus, una tarde de septiembre y con una grabadora
en medio de la charla resultó una revisión al trabajo periodístico, el
Director y fundador del periódico El Tiempo, ex corresponsal del
periódico La Jornada Nacional, en La Piedad Michoacán, acostumbrado a
hacer periodismo en las grandes ligas obsequió una entrevista al gremio
de la región del Valle de Texmelucan.
Reconocido como "el periodista que sobrevivió a Calderón", acepta hablar para Valkiria (V) en la antesala de un taller sobre Crónica periodística, el cual habremos de tomar algunos reporteros con la necesidad de aprender a hacer mejor el oficio.
Y en medio de los nervios, por pensar en buenas preguntas, cae el primer párrafo: "intento reflejar un poquito reflejar la realidad de lo que pasa en Michoacán, la realidad tan violenta que parecen historias fantásticas, parecen de un México subrrealista yo creo que ni a Gabriel García Márquez se le hubiera ocurrido escribir algo como lo que pasa en México, donde el crimen organizado y los gobiernos estatales llegan a ser una sola persona en algún momento determinado."
Jesús Lemus Barajas (JLB) pasó 3 años y 5 días en el penal de Puente Grande, Jalisco, arrestado el 7 de mayo de 2008 en Cueramaro Guanajuato, acusado de pertenecer a la familia michoacana, golpeado, torturado y amenazado de muerte vio llegar una sentencia absolutoria y su libertad el 11 de mayo del 2011: Durante su detención, la familia también fue objeto de intimidaciones, en más de una ocasión los soldados catearon su domicilio sin orden judicial, con ese motivo presentó una queja ante la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH). fue calificado como un delincuente de alta peligrosidad durante ese tiempo convivió con personajes como Rafael Caro Quintero, Mario Aburto, Daniel Arizmendi, El Mocha orejas, y Alfredo Beltrán Leyva, El Mochomo, entre otros.
Vladimir Cacho Guzmán, Rubén Emanuel Castro y Gilberto Estrada, abogados encargados de su defensa, fueron asesinados en una carretera que media entre Guanajuato y Michoacán, 31 de agosto de 2009.
En su proceso, la autoridad nunca lo tomó en cuenta como periodista, con la persecución a cuestas y con las amenazas de la delincuencia organizada continua su trabajo en medio de medidas de seguridad y protección.
(V) ¿Porque la necesidad de hacer un libro sobre el trabajo periodístico?
(JLB)Porque yo encuentro que no hay en ningún medio, en los últimos 20 años que he visto el ejercicio periodístico en Michoacán, ningún medio local ha sido exacto en la información, ningún medio internacional se ha acercado con la exactitud que se requiere para llevar una información al lector y creo que ningún medio a nivel nacional ha estado tan presente como lo requiere la sociedad, creo que no hay una fuente informativa documental fidedigna que refiera lo que está pasando en Michoacán, por eso es que yo me decido a escribir un libro de qué es lo que está pasando, los orígenes de eso y las consecuencias del estado fallido, insisto, de lo que se ha convertido Michoacán.
Porque además, déjame decirte Laura, que Michoacán es como un laboratorio en el que pasa todo lo que debe de pasar en México, todo lo que pasa en Michoacán, se replica a nivel nacional, lo que pasa en Michoacán sucede en Oaxaca, sucede en Veracruz, sucede en Tamaulipas, en Nayarit, Chiapas, en cualquier parte que voltees al país, pasa lo que pasa en Michoacán, ¿Por qué? Porqué Michoacán amalgama, tiene todos esos factores que hacen que se convierta esto en una crisis nacional, tiene una mala distribución de la riqueza, tiene un mal gobierno, tiene una miseria increíblemente inmensa y sobre todo, tiene una riqueza natural inexplotable que la explotan unos cuantos, ese es el punto, yo creo, focal de lo que pasa a nivel nacional y que está concentrado ahí en Michoacán, por eso es que me decido a hacer este libro.
Tierra Sin Dios Crónica del Desgobierno de Michoacán es un libro eminentemente periodístico donde intento reflejar un poquito reflejar la realidad de lo que pasa en Michoacán, la realidad tan violenta que parecen historias fantásticas, parecen de un México subrrealista yo creo que ni a Gabriel García Márquez se le hubiera ocurrido escribir algo como lo que pasa en México, donde el crimen organizado y los gobiernos estatales llegan a ser una sola persona en algún momento determinado.
Reconocido como "el periodista que sobrevivió a Calderón", acepta hablar para Valkiria (V) en la antesala de un taller sobre Crónica periodística, el cual habremos de tomar algunos reporteros con la necesidad de aprender a hacer mejor el oficio.
Y en medio de los nervios, por pensar en buenas preguntas, cae el primer párrafo: "intento reflejar un poquito reflejar la realidad de lo que pasa en Michoacán, la realidad tan violenta que parecen historias fantásticas, parecen de un México subrrealista yo creo que ni a Gabriel García Márquez se le hubiera ocurrido escribir algo como lo que pasa en México, donde el crimen organizado y los gobiernos estatales llegan a ser una sola persona en algún momento determinado."
Jesús Lemus Barajas (JLB) pasó 3 años y 5 días en el penal de Puente Grande, Jalisco, arrestado el 7 de mayo de 2008 en Cueramaro Guanajuato, acusado de pertenecer a la familia michoacana, golpeado, torturado y amenazado de muerte vio llegar una sentencia absolutoria y su libertad el 11 de mayo del 2011: Durante su detención, la familia también fue objeto de intimidaciones, en más de una ocasión los soldados catearon su domicilio sin orden judicial, con ese motivo presentó una queja ante la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH). fue calificado como un delincuente de alta peligrosidad durante ese tiempo convivió con personajes como Rafael Caro Quintero, Mario Aburto, Daniel Arizmendi, El Mocha orejas, y Alfredo Beltrán Leyva, El Mochomo, entre otros.
Vladimir Cacho Guzmán, Rubén Emanuel Castro y Gilberto Estrada, abogados encargados de su defensa, fueron asesinados en una carretera que media entre Guanajuato y Michoacán, 31 de agosto de 2009.
En su proceso, la autoridad nunca lo tomó en cuenta como periodista, con la persecución a cuestas y con las amenazas de la delincuencia organizada continua su trabajo en medio de medidas de seguridad y protección.
(V) ¿Porque la necesidad de hacer un libro sobre el trabajo periodístico?
(JLB)Porque yo encuentro que no hay en ningún medio, en los últimos 20 años que he visto el ejercicio periodístico en Michoacán, ningún medio local ha sido exacto en la información, ningún medio internacional se ha acercado con la exactitud que se requiere para llevar una información al lector y creo que ningún medio a nivel nacional ha estado tan presente como lo requiere la sociedad, creo que no hay una fuente informativa documental fidedigna que refiera lo que está pasando en Michoacán, por eso es que yo me decido a escribir un libro de qué es lo que está pasando, los orígenes de eso y las consecuencias del estado fallido, insisto, de lo que se ha convertido Michoacán.
Porque además, déjame decirte Laura, que Michoacán es como un laboratorio en el que pasa todo lo que debe de pasar en México, todo lo que pasa en Michoacán, se replica a nivel nacional, lo que pasa en Michoacán sucede en Oaxaca, sucede en Veracruz, sucede en Tamaulipas, en Nayarit, Chiapas, en cualquier parte que voltees al país, pasa lo que pasa en Michoacán, ¿Por qué? Porqué Michoacán amalgama, tiene todos esos factores que hacen que se convierta esto en una crisis nacional, tiene una mala distribución de la riqueza, tiene un mal gobierno, tiene una miseria increíblemente inmensa y sobre todo, tiene una riqueza natural inexplotable que la explotan unos cuantos, ese es el punto, yo creo, focal de lo que pasa a nivel nacional y que está concentrado ahí en Michoacán, por eso es que me decido a hacer este libro.
Tierra Sin Dios Crónica del Desgobierno de Michoacán es un libro eminentemente periodístico donde intento reflejar un poquito reflejar la realidad de lo que pasa en Michoacán, la realidad tan violenta que parecen historias fantásticas, parecen de un México subrrealista yo creo que ni a Gabriel García Márquez se le hubiera ocurrido escribir algo como lo que pasa en México, donde el crimen organizado y los gobiernos estatales llegan a ser una sola persona en algún momento determinado.
Lo que escribo yo en Tierra Sin Dios es la historia de cómo se fue
fraguando es amalgama que hoy pinta jodido al país, cuando el crimen
organizado llego a gobernar estados completos como el caso de Michoacán
que los caballeros templarios tenían Gobernadores, Alcaldes, Diputados,
Senadores y yo me voy aquí un poquito a hacer historia y platico en
Tierra Si Dios un poquito acerca de cómo se dan las primeras
organizaciones criminales en Michoacán, cómo van evolucionando, cómo
entran otros grupos criminales por el control del estado y cómo
finalmente llegan al estado fallido que se convierte Michoacán cuando el
crimen organizado mantiene al gobierno estatal.
Hago una referencia así muy rápida de lo que es Michoacán y su riqueza y
la intervención de las empresas chinas, cómo se apoderan de las minas,
como se apoderan de los bosques: la tala clandestina, como se apoderan
del puerto; es una radiografía muy inmediata de lo que pasa en Michoacán
y todo el clima de desgobierno que hay.
v) ¿Porque la necesidad de hacer un libro sobre el trabajo periodístico?
Porque yo encuentro que no hay en ningún medio, en los últimos 20 años
que he visto el ejercicio periodístico en Michoacán, ningún medio local
ha sido exacto en la información, ningún medio internacional se ha
acercado con la exactitud que se requiere para llevar una información al
lector y creo que ningún medio a nivel nacional ha estado tan presente
como lo requiere la sociedad, creo que no hay una fuente informativa
documental fidedigna que refiera lo que está pasando en Michoacán, por
eso es que yo me decido a escribir un libro de qué es lo que está
pasando, los orígenes de eso y las consecuencias del estado fallido,
insisto, de lo que se ha convertido Michoacán.
Porque además, déjame decirte Laura, que Michoacán es como un
laboratorio en el que pasa todo lo que debe de pasar en México, todo lo
que pasa en Michoacán, se replica a nivel nacional, lo que pasa en
Michoacán sucede en Oaxaca, sucede en Veracruz, sucede en Tamaulipas, en
Nayarit, Chiapas, en cualquier parte que voltees al país, pasa lo que
pasa en Michoacán, ¿Por qué? Porqué Michoacán amalgama, tiene todos esos
factores que hacen que se convierta esto en una crisis nacional, tiene
una mala distribución de la riqueza, tiene un mal gobierno, tiene una
miseria increíblemente inmensa y sobre todo, tiene una riqueza natural
inexplotable que la explotan unos cuantos, ese es el punto, yo creo,
focal de lo que pasa a nivel nacional y que está concentrado ahí en
Michoacán, por eso es que me decido a hacer este libro.
¿Hay otras Obras?
Sí antes que Tierra Sin Dios, el primer libro que escribí fue Los
Malditos, Crónica Negra Desde Puente Grande, donde hago un breve retrato
de palabras de lo que fue mi vida en la cárcel, yo estuve en la cárcel 3
años y cinco días acusado de delitos como narcotráfico y delincuencia
organizada, cuando el gobierno de Felipe calderón acusaba a todo mundo
de eso, porque había que engordar las cifras y las estadísticas y yo en
un momento determinado fui incómodo para el gobierno de Felipe Calderón y
me manda a la cárcel, yo mi estancia en la cárcel, después de muchas
vicisitudes la convierto en un libro y es Los Malditos donde cuento la
historia de cómo viven los pesos más celebres, entre ellos Rafael Caro
Quintero, entre ellos el Mocha orejas, Alfredo Beltrán Leyva, Mario
Aburto, por decir algunos. Ese lo publico en el 2013, en el 2014
publiqué una biografía no autorizada de Mireles el rebelde, es un libro
donde cuento la historia de los grupos de auto defensa como surgen y
como el doctor José Manuel Mireles Valverde crea el primer grupo de
autodefensa de ciudadanos armados contra el crimen organizado, supliendo
las funciones del estado, que es la seguridad de la población.
Después publico otro libro que se llama "Michoacán en guerra" donde doy
una breve semblanza de cuáles son los factores que han influido para
que Michoacán se encuentre tan violento como es. Después de ese libro
publiqué "Cara de diablo" es una crónica novelada de cómo se gestó en
Michoacán un grupo de autogobierno en una población muy pequeña del
estado donde gobierna Dios a través de la Virgen del Rosario, a través
de una vidente y de un sacerdote y cómo 40 mil almas están a la
disposición de lo que diga la vidente para hacer lo que le dé la
voluntad de ella y como eso se convierte en la posibilidad de un
suicidio colectivo, por el fanatismo en el que se vive y por la pobreza
tan extrema en la que se está.
Después aparece "Tierra Sin Dios" sería mi quinto libro
¿Y después de "Tierra sin Dios" que viene?
Estoy escribiendo "Los Malditos II" la crónica negra de Puente Grande,
desde un enfoque, primero quiero platicar muchas cositas que se me
quedaron en el tintero que no lo platique en "Los Malditos I" y después
quiero platicar como viví la cárcel cuando estuve en el área de
procesados, cuando estuve viviendo con criminales tan célebres como el
asesino del Cardenal Posadas Ocampo, del asesino del gato Feliz, del
periodista de Z, como fue mi estancia en esa parte de la cárcel, en mi
última etapa de mi reclusión y retomo otras historias que no conté en el
primer libro, que considero que son dignas de contarse por lo que se
vive, cuento historias, por ejemplo: de El Grande (el que agarraron aquí
en puebla) como era su relación con el gobierno de Felipe Calderón y
como es que el gobierno de Felipe Calderón lo cobija y lo hace uno de
los narcotraficantes más poderosos del país eso es el cuento y ese es el
libro que ahorita estoy preparando para entregarlo primeramente Dios, a
principios del año que entra.
Obviamente el tema del narcotráfico vende, pero no todos escribimos de
eso. De toda esta experiencia tan fuerte ¿Qué es lo que le quisiera
compartir Jesús Lemus, a todos los que estamos en el oficio del
periodismo, para hacer un periodismo responsable?
No sé si venda o no venda el tema del narcotráfico, pero si te puedo
asegurar una cosa, que es el tema actual, es el tema que me tocó vivir,
cuando uno vivió en la revolución, uno escribe novela revolucionaria,
cuando hubo independencia y hubo revuelta en México, desde Europa
escribieron temas sobre la Independencia de México, ahorita en este
momento coyuntural en México, nos ha tocado vivir el tema del narco y no
por eso como periodistas nos podemos sustraer, creo que la
responsabilidad de nosotros es escribir lo que está pasando en el
momento.
Si en este momento hay una invasión extraterrestre, pues yo creo que
hay que publicarla y hay que escribir sobre eso y no es porque venda o
no venda, es porque nos tocó el momento y acuérdate que nosotros somos
nuestras circunstancias, nosotros como escritores, como periodistas,
escribimos lo que está pasando, no decidimos lo que vamos a escribir,
las historias son las que nos van a ubica a nosotros mismos para poder
publicarlas, lo que yo quiero compartir en este tipo de historias, que
son muy difíciles, a veces, e contar, porque la sociedad las toma con
recelo; un tema de narcotráfico porque nosotros mismos somos de una
doble moral, a veces, la sociedad es de una doble moral, porque por un
lado tenemos, no quiero decirlo que se entienda mal, pero tenemos cierta
simpatía por los narcotraficantes, pero por fuera los repudiamos, al
narcotráfico, a lo mejor no somos adictos a las drogas pero decimos que
ojalá sea legalizada la marihuana .
Entonces es como un llamado a la conciencia también, para que la gente,
pues pueda ir definiendo, yo creo que debemos dejar de tenerle miedo,
nosotros como periodistas a que temas escribir y que temas no escribir,
yo en este libro quiero aportar, únicamente, la urgencia de uno como
periodista, de publicar lo inmediato en su entorno. Que nosotros somos
corresponsables de lo que estamos viviendo y que estamos obligados a
publicar lo que pasa a nuestro alrededor, no podemos nosotros discernir y
discriminar y decir esto lo público y no lo público; yo cuando salí de
la cárcel bien pude haber optado por decir: No público lo que paso en la
cárcel fue una pesadilla y voy a lo que sigue.
Pero siento la obligación de contar lo más peor de nuestra sociedad,
entonces, lo que quiero decirle a los jóvenes, a las nuevas generaciones
que se inician en el periodismo es la obligación, es el compromiso
moral que tenemos con nosotros mismos para publicar lo que está pasando,
lo que hay en nuestro entorno, no nada más para tener la obligación,
perdón, el derecho de dejar de publicar, porque tenemos derecho de dejar
de publicar, pero también tenemos la obligación de publicar lo que está
pasando, yo creo que sobre eso voy, quiero nada más dejar constancia de
que no es publicar lo que nos guste nada más, a mí me ha tocado
escribir como no te imaginas este tipo de libros, como no te imaginas,
por lo que representan y por lo que me duelen en mi experiencia
personal, pero sin embargo siento la obligación de contarlo y de
comentarlo con otras gentes, yo creo que esa debe ser la responsabilidad
de los periodistas.
V) ¿Cómo encontrar un equilibrio para ganarle a las redes y ser certero?
JL) Nosotros como periodistas debemos tener la capacidad de equilibrar
entre inmediatez y sensatez de la información, es decir: lo quiero
inmediato y voy con el riesgo de equivocarme en datos, en cifras, en
circunstancias. Lo quiero sensato: lo que el periodista percibe en el
ambiente, no solamente en sus fuentes, sino que vaya y se apersone en el
lugar de los hechos. Cuando yo hago una información sensata es porque
la siento, porque la vivo, porque aparte de que entrevisté a 3, 4 o
cinco fuentes, como lo dice el manual del periodismo, aparte yo estoy en
el lugar de los hechos y sentí lo que estaba pasando, entonces eso es
lo que hoy los periodistas debemos de tener: ¿quiero inmediatez o quiero
sensatez en mi información? Si quiero inmediatez vete a las redes
sociales, vete al tuiter, vete al Facebook, vete a cualquier cosa de
esas de internet y te vas a llenar de mucha basura que realmente te va a
dejar vacío porque no te vas a informar correctamente.
Como periodista, debo de escribir con la sensatez y la madurez que me
da la distancia, porque no es lo mismo que el tuitero escriba a los dos
segundos o a los 15 segundos de que pasó el temblor y no hay distancia
entre el hecho y la digestión de la información. Entre el hecho y la
digestión de la información pasan un mundo de cosas y eso es lo que a
veces los periodistas no observamos.
Cuando le damos distancia al hecho y al escribir, cuando tú te alejas
del lugar de los hechos y vas manejando a tu casa o a la redacción y
comienzas a crear en tu cabeza la entrada, como vas a rematar y que es
lo más importante que sustrajiste, eso te va oxigenando la información,
cuando llegas a ese punto va pasando la transformación y te estas
obligando a ser muy certera.
Nosotros como periodistas debemos discernir dos cosas; debo de
discernir entre la libertad de expresión y la libertad del libre
ejercicio periodístico, cuando haces libertad de expresión la puedes
hacer como te de tu gana, porque tú tienes el derecho de decir las
pendejadas que quieras. Pero como periodista no puedes darte el lujo de
decir pendejadas. Entonces como periodista tienes la obligación de decir
cosas verdaderas y eso es lo que se llama libre ejercicio periodístico:
la certeza de que estás haciéndolas cosas bien diciendo la verdad y que
te estas ajustando lo más posible a la verdad.
Es un concepto que a los nuevos periodistas que se forman en la talacha, en el oficio, les debe de quedar bien claro: que el periodismo no son las redes sociales, las redes sociales no valen madre frente al periodismo, es algo que lo debes de sentir tu como persona, debes de digerir antes de vomitárselo a los demás, tú lo debes de digerir, entender y asumir la importancia del hecho.
Yo he visto muchachos, periodistas que se están formando en muchas
partes y nada más que lean, que se documenten, que sigan los cánones
del periodismo viejo, no acudir a una entrevista sin investigar del
entrevistado, no escribir sobre un hecho sin saber de él, lo más que
puedan. O sea, los periodistas no lo sabemos todo, tenemos que recurrir
siempre a fuentes documentales y no me refiero nada más a las formales
también a las informales; debes leer los libros que más te gusten leer.